Los últimos meses hemos podido ver los avances de Facebook en la integración de sus tres grandes plataformas, la propia red social, junto con WhatsApp e Instagram.
Sin embargo, una demanda reciente de la Administración de Estados Unidos, solicita a la Justicia que exija al gigante tecnológico vender estas dos últimas plataformas. ¿Es posible que WhatsApp e Instagram dejen de estar vinculadas a Facebook? ¿Cuál sería su futuro entonces? Analizamos estas cuestiones en este artículo.
El monopolio de Facebook: ¿Es verdad que no existen alternativas?
La Administración acusa a Facebook de monopolio. Según ellos, la empresa compró WhatsApp e Instagram con el fin de quitarse de en medio a su competencia más fuerte.
Como tal, la compañía no tiene rivales en su sector y, por tanto, puede marcar precios y pautas a su antojo.
Desde Facebook argumentan que hasta el momento ese tipo de adquisición de empresas no ha tenido queja alguna.
Además, también dicen que hay alternativas. Algunas de las mencionadas son Twitter, TikTok o Pinterest.
La cuestión es si estas alternativas son o no reales. En cuestión de números, parece que siguen estando muy lejos de lo conseguido por Facebook. Sin embargo, ofrecen muchas de las opciones que las plataformas de Mark Zuckerberg incluyen.
El futuro de WhatsApp e Instagram sin Facebook
En el caso de que la demanda sea un éxito y Facebook tenga que desvincularse de WhatsApp e Instagram. ¿Qué es lo más probable que pase?
La primera opción es que otro gigante tecnológico, de menor tamaño que Facebook, adquiera una o las dos plataformas. Todo lo desarrollado hasta ahora, como mínimo, se modificaría para integrarse en su nuevo hogar.
Otra opción es que un fondo de inversiones adquiera las plataformas, probablemente por separado.
En el caso de WhatsApp, su posición de mercado como líder en mensajería instantánea es una ventaja. Sin embargo, carecería del poder económico de Facebook para hacer frente a cada vez más competencia. Es probable que en el futuro usáramos otro tipo de plataforma para comunicarnos.
En el caso de Instagram, su competencia es todavía más fuerte. Si consigue rentabilizarse, podría situarse al nivel de Twitter o Pinterest en la actualidad. Una plataforma independiente con rentabilidad suficiente para conseguir inversores nuevos y que atrae a los anunciantes.
No parece un futuro tan malo para los usuarios, pero sí tendríamos que decir adiós a los planes de integración entre Facebook, WhatsApp e Instagram, así como de todas las funciones anunciadas de un futuro en comunicación digital que no veríamos de momento.
