Uno de los efectos secundarios que tiene el coronavirus o COVID-19 en su expansión mundial, sin importar a quién haya contagiado, es que el uso de Internet se ha disparado. Más concretamente, la descarga de apps y redes sociales, que ha aumentado exponencialmente.
Muchos países han decretado la situación de emergencia nacional, restringiendo a sus ciudadanos la movilidad fuera de casa, por lo que muchos de ellos han optado por aprovechar al máximo su servicio de conexión a Internet.
Instagram registra caídas en todo el mundo
Instagram es la red social de mayor tendencia en el mundo entero. Esto significa que los usuarios se interesan antes por ella que por ninguna otra, lo que le permite registrar un gran número de seguidores en crecimiento.
Además, también es utilizada cada vez durante más horas, sobre todo desde que se decretó por el coronavirus la cuarentena domiciliaria.
Los servidores de la plataforma podemos considerar que son de lo mejorcito en la actualidad tecnológica. Sin embargo, no estaba previsto que recibieran un interés mundial de este calibre y durante tanto tiempo a lo largo del día.
Como consecuencia, ya estamos notando las primeras caídas de la red social, en diferentes países. Estados Unidos, Europa Central, América del Sur, Japón o la India son de las zonas más afectadas.
Esto puede repetirse durante los próximos días o semanas, del mismo modo que la compañía puede invertir en unos servidores temporales más potentes, para aguantar la masiva conexión que va a tener durante este periodo.
Las operadoras advierten a los usuarios
Antes de que sucediera la caída de las redes sociales, las mismas operadoras han tenido que llamar a la prudencia a todos los usuarios.
Hablamos de millones de personas utilizando servicios de conexión, sobre todo en horarios en los que la navegación suele ser mínima, porque la gente está normalmente trabajando en la oficina.
Entre el teletrabajo que se ha fomentado para la mayoría de profesionales y la afluencia de usuarios que tienen multiplicado su tiempo libre, puede que no garanticen el servicio.
Estas operadoras han pedido que los usuarios, tanto de telefonía móvil como de Internet en casa, intenten minimizar su conexión en el horario laboral, dado que se pueden producir caídas del servicio o ralentización en el mismo.
Unido al problema de saturación de tráfico que pueden sufrir los servidores de plataformas como Instagram, si no racionamos el uso de Internet, podríamos tener que sufrir una conexión bastante peor de la que esperamos.