Tal y como comentamos en el anterior post publicado en este blog, las redes sociales ofrecen multitud de ventajas como instrumentos útiles para el desarrollo de técnicas de venta dirigidas a nuestro público objetivo, convirtiéndose, en la actualidad, en un elemento básico en la planificación de nuestra estrategia comercial.
Pero para llevar a cabo una buena estrategia a través de las redes sociales que componen la Web 2.0 es preciso partir de cuales son, de forma específica, nuestros objetivos de comunicación con nuestro mercado de referencia, ya que estos pueden ir desde un acercamiento directo o indirecto a nuestros clientes, a la detección de necesidades y deseos de compra por parte de estos o el desarrollo de medidas de branding que permitan un aumento de su confianza y fidelización.
Tras la concreción de nuestra finalidad específica en materia comercial, el primer paso consistirá en desarrollar nuestra presencia y visibilidad en redes sociales, a través de la creación de un perfil en el que se reflejen de forma expresa nuestras competencias, valor añadido y elementos diferenciales en relación al resto de entidades que conforman nuestro sector de actividad. Para ello, la red social profesional Linkedin ofrece unas posibilidades inmejorables.
De forma análoga, nuestra presencia en Twitter es más que aconsejable, dado que actualmente es considerada como una potente herramienta de comunicación e influencia que, además, goza de una gran credibilidad entre sus usuarios.
Asimismo, Twitter permite llevar a cabo un seguimiento de aquellos líderes de opinión en nuestro ámbito, con el objetivo de que nosotros podamos ser identificados, a su vez, como expertos por parte de nuestro público objetivo, para lo cual será fundamental la difusión de artículos interesantes relacionados con nuestra actividad comercial.
Una vez, desarrollada eficazmente nuestra presencia y visibilidad en la web 2.0, mediante la creación de nuestro profesional perfil online, será el momento de trabajar en la creación y dinamización de nuestra red personal, sobre la que profundizaremos en nuestra próxima entrada, con la que finalizaremos la exposición de los pasos para el diseño de una estrategia de prospección comercial a través de las redes sociales.
