Por si alguien todavía lo desconoce, la compañía Facebook es propietaria no solo de la red social y todo lo que tiene que ver con ella, sino también de otras empresas tecnológicas, actualmente a la vanguardia del sector. De todas ellas, destacan WhatsApp e Instagram por encima del resto.
Lo cierto es que hasta el momento, ambas plataformas digitales habían seguido su curso, de forma más o menos independiente. Sobre todo el sistema de mensajería instantánea líder en el mercado mundial, parecía más ajeno a Facebook, pese a ser de su propiedad. Pero todo ello podría cambiar en las próximas semanas.
Facebook como marca en WhatsApp e Instagram
Uno de los pasos que quieren dar desde Facebook es vincular la marca a los dos servicios digitales que, por el momento, son gratuitos para los usuarios.
De confirmarse la noticia, en cuanto esté implementado se comenzará a identificar cada una como “WhatsApp de Facebook” e “Instagram de Facebook“.
Toda una estrategia de branding que, por ahora, se desconoce si va a calar entre los usuarios hasta el punto de modificar la forma que tienen de llamar a estas plataformas.
Lo que sí va a cambiar claramente serán los elementos visuales que, de alguna forma, destacarán esta pertenencia a Facebook, a modo de copyright o propietario de sus derechos.
La integración de WhatsApp e Instagram en Facebook
Parece un nuevo escalón en el ascenso hacia la integridad total entre las 3 plataformas. De hecho, se da cuando ya los cofundadores anteriores de estos desarrollos digitales han abandonado las empresas, precisamente por las tensiones con Facebook y su forma de imponer un giro en la gestión de cada una de ellas.
Los últimos rumores hablan de una integración que podría abarcar compartir los estados personales entre las 3 plataformas o, incluso, permitir que los chats se unifiquen en uno solo, para que los usuarios no tengan que estar saliendo de uno a otro.
Una historia firmada con miles de millones
¿Tiene derecho Facebook a apropiarse tanto de WhatsApp e Instagram? Pues al margen de lo que hayan firmado en el contrato de compra, lo cierto es que la cantidad invertida en cada plataforma ha sido considerable.
En WhatsApp Facebook tuvo que pagar 22.000 millones de dólares, cuando contaba con la mitad de usuarios que ahora.
Por lo que respecta a Instagram, pese a que solo fue 2 años antes que la adquisición de WhatsApp, la compra fue algo más asequible. “Solo” le costó a Facebook mil millones de dólares, aunque la red social solo tenía unas decenas de millones de usuarios.
