Tinder es la red social por antonomasia para conocer gente. Ya la usan 5,7 millones de usuarios en todo el mundo. Sigue dominando su sector, pese a la creciente competencia, que de todas formas no consigue seguirle el ritmo, de momento.
Para mantenerse en lo más alto, sus responsables intentan seguir mejorando las funciones de la red social, priorizando siempre la buena experiencia de los usuarios, buscando los “matches” con otros perfiles afines.
Uno de los aspectos en los que se han querido centrar con las últimas novedades, es el relativo a la seguridad personal, sobre todo en dos acciones: Durante la búsqueda de usuarios y en la misma cita.
Verificación de perfil con fotografías
Tinder tenía pendiente la verificación de los perfiles. El hecho de que un perfil tenga unas fotografías que parezcan reales, en ningún caso nos confirma que es así.
Por ese motivo, desde la red social han implementado un nuevo sistema de seguridad, que consiste en verificar de manera instantánea al usuario.
Para ello, se le muestra la fotografía de una persona haciendo una pose, por ejemplo, guiñando un ojo. El usuario debe realizar la misma pose y enviar la fotografía al sistema, para verificar que se trata de alguien real y que, además, sus fotografías corresponden con su perfil.
Los usuarios que verifican su perfil reciben un check azul, por lo que pueden demostrar de manera visual que su perfil es real, añadiendo seguridad a las conversaciones que establezcan con otros usuarios.
Botón del pánico en Tinder
Tan útil como polémico. Tinder ha querido hacer algo muy bien valorado por sus usuarios, pero quizás las consecuencias de la metodología no son las más apropiadas.
Se trata de un botón del pánico, que los usuarios podrán utilizar durante una cita, en el caso de que consideren que corran peligro. Esta llamada de urgencia es gestionada por una empresa de seguridad, que transmite el caso a un servicio de emergencias, que podría actuar de forma inmediata de ser necesario.
La polémica ha venido por el hecho de que, al pulsar el botón del pánico, esta empresa de seguridad requiere de datos personales del usuario, tales como su número de teléfono o su ubicación entre otros.
Es lógico que necesite esta información, pero no tanto que la compañía se reserva el derecho a compartir estos datos con “terceros”, sin especificar claramente con quién va a compartirlos.
